YO Y ÉL MISMO A LA VEZ










Yo y él mismo a la vez, es una escenificación en la que personifico a mi padre usando su propia chamarra del ejército de los Estados Unidos. Un simulacro, realizado en su propia habitación, y a su vez un ejercicio performático de micropoder en el que no soy yo contra él, sino él mismo haciendo uso de su fuerza y de sus armas para ejercer su figura de autoridad.
A sus casi 80 años, una figura que insiste en mostrarse en condiciones de batalla, aceptando con dificultad su poca productividad y rapidez, condiciones que contradicen su propia concepción de lo masculino.
La acción ante la cámara me sitúa en un gesto que podría considerar infantil, un ejercicio lúdico que me conecta con la admiración temprana ejercida hacia la figura paterna. Su determinación, fuerza y dureza hoy me enfrentan ante otros arquetipos de poder masculino, dejando en mi persona un sentimiento permanente de fragilidad y conflicto, la sensación de habitar el cuerpo de un niño desprotegido, cubierto tan solo con la chamarra de su padre.